En resumen, Ēen las situaciones escolares, las relaciones con los compa–eros pueden ser estructuradas para crear una interdependencia importante a travˇs del aprendizaje cooperativo. En las situaciones de aprendizaje cooperativo, los estudiantes experimentan sentimientos de pertenencia, de aceptaci—n y de apoyo; y las habilidades y los roles sociales requeridos para mantener unas relaciones interdependientes pueden ser ense–adas y practicadas. A travˇs de repetidas experiencias cooperativas, los estudiantes pueden hacerse sensibles a quˇ conductas esperan los otros de ellos y aprender las habilidades necesarias para responder a tales expectativas. Haciˇndose mutuamente responsables de la conducta social apropiada, los estudiantes pueden influir fuertemente en los valores que internalizan y el autocontrol que desarrollan. Es a travˇs de la pertenencia a una serie de relaciones cooperativas que los valores son aprendidos e internalizados y la sensibilidad social y la autonom’a son desarrolladas. Es a travˇs de una interacci—n cooperativa prolongada con otras personas que tiene lugar un sano desarrollo social, con un balance general de confianza m‡s bien que de desconfianza en las otras personas, la capacidad de ver las situaciones y los problemas desde una variedad de perspectivas, un significativo sentido de direcci—n y prop—sito en la vida, un conocimiento de la interdependencia mutua con otras personas, y un sentido integrado y coherente de la identidad personalČ (Johnson, 1979; Johnson y Matross, 1977) (Johnson y Johnson, l987a, p. 27). De ah’ la enorme importancia que deber’a tener la implementaci—n de mˇtodos cooperativos en el aula.Ź